Todo sobre la hormona Leptina para adelgazar
La hormona de la saciedad
La hormona de la saciedad
¿Qué es la Leptina?
Es una hormona producida en el tejido adiposo que brinda al cerebro información acerca de las reservas de grasa que tiene el organismo. De este modo, al unirse la Leptina (proteína OB) con el núcleo ventromedial en el hipotálamo, donde se encuentra el centro de saciedad, se regula naturalmente el consumo de alimentos, desaparece el apetito, el sujeto se siente satisfecho y no hay más deseo de seguir comiendo, además también aumenta el gasto de energía.
La Leptina y su relación con la obesidad
Le Leptina fue descubierta en 1994 por Jeffrey M. Friedman y Y. Zhang del Laboratorio de Genética Molecular de la Universidad Rockefeller, desde entonces revolucionó el campo de la medicina en lo que a obesidad y sobrepeso se refiere.
La relación entre la Leptina y la obesidad fue descubierta al observar como actuaba en ratones de laboratorio obesos, los que al recibir esta hormona disminuían la ingesta de alimentos y adelgazaban. Desde entonces se han realizado infinidad de estudios e investigaciones, pero los resultados no han sido del todo alentadores, ya que en los humanos la Leptina no parecería actuar exactamente igual que en los ratones.
En humanos obesos y con sobrepeso hay concentraciones altas de Leptina en sangre, ya que al ser producida por las células grasas, al haber exceso de grasa en el organismo, se incrementa su nivel reduciéndose el apetito y la sensación de hambre. Por lo cual, cuando se realiza una dieta para bajar de peso, el menor consumo de calorías con la consecutiva baja de grasa corporal, produce un descenso en los niveles de Leptina limitando su efecto de saciedad y supresor del apetito.
Una utilización diferente de la Leptina para adelgazar
Un estudio realizado en el Centro Médico de la Universidad de Columbia en Nueva York, publicado en The Journal of Clinical Investigation, plantea un uso distinto de la Leptina en el tratamiento del sobrepeso y la obesidad. El mismo se basa en la siguiente hipótesis: En los obesos las concentraciones de Leptina en sangre son altas, cuando adelgazan esos niveles disminuyen. Sugieren además, que los bajos niveles de la hormona vuelven más vulnerables a los sujetos a ciertos alimentos, por lo cual mantener el peso sería muy difícil.
Los investigadores comprobaron la baja en los niveles de Leptina y como ésta produce un descenso de la actividad de ciertas zonas del cerebro (las que contribuyen para que la persona se resista a ciertos alimentos y las que envían señales de saciedad) a través de una resonancia magnética realizada a pacientes que habían bajado de peso luego de someterse a una dieta.
Fundados en estas investigaciones, proponen la utilización de la hormona Leptina para estabilizar los niveles de la hormona, en pacientes que han bajado de peso tras la realización de una dieta.