Gimnofobia: Fobia a la desnudez

Se trata de una de las fobias más extrañas. Es el miedo a la desnudez tanto propia como ajena. Esta muy asociada a la comparación que estas personas hacen de sus propios cuerpos, los que los rodean y los que idealizan en sus mentes.

En general las fobias se desarrollan luego de alguna experiencia traumática. En este caso puede ser luego de algún episodio traumático referido a la intimidad en un baño o vestuario público.

La mayoría de las personas que padecen este trastorno, padecen además otros trastornos de ansiedad y problemas con la imagen corporal, como ser el trastorno dismórfico corporal, en el cual quien lo padece siente una preocupación exagerada por algún defecto o característica física ya sea real o imaginaria.

Los que padecen gimnofobia, se obsesionan con su apariencia, se ponen nerviosas y no pueden mostrar sus cuerpos ni a ellos mismos ni a los demás. Esto dificulta muchísimo la intimidad sexual y las visitas al médico, por ejemplo, entre otras cosas. También el verse a solas frente a un espejo es algo que suelen rechazar.

Emmanuele Jannini, miembro del comité científico de la Sociedad Europea de Medicina Sexual y profesor del departamento de Medicina Experimental de la Universidad de L’Aquila (Italia), explcia:

es una especie de dismorfofobia generalizada. Es decir, el miedo que siente de ser genitalmente inadecuado. Y no ocurre sólo con el tamaño del pene, también con el de los senos, las piernas, la vagina, y otras partes del cuerpo

Síntomas fisiológicos

Quienes padecen este tipo de fobia al enfrentarse a una situación que los obliga a estar desnudos tienen síntomas fisiológicos como:

• Taquicardia
• Dificultades para respirar

Tratamiento

Según los expertos, al igual que otro tipo de fobias la gimnofobia debe ser tratada con psicoterapia y otro tipo de herramientas que sirvan para que el fóbico cambie su forma de pensar de sí mismo y venza el miedo a su desnudez.

La desensibilización sistemática sería la acción terapéutica más acertada, es decir el acercar de manera progresiva al paciente al objeto que le causa la fobia. Es importante que la persona conozca y entienda lo que le está pasando, para que aprenda a bajar los niveles de ansiedad y a valorar el defecto que cree tener como algo que percibe de manera distorsionada y que las consecuencias que el teme anticipadamente no tienen porque ser las que él cree. Los especialistas empiezan por lo que llaman la exposición jerarquizada, es decir empezar por lo que al paciente le causa menos temor. Por ejemplo, si le produce menos miedo ver desnudo a alguien más que a sí mismo, empezar por eso e ir avanzando paulatinamente.