Coccidioidomicosis aguda

Infección micótica causada por el hongo Coccidioides immitis

Coccidioidomicosis aguda
Fotomicrografía de los pulmones de un paciente con neumonía aguda coccidioidal

Se trata de una infección micótica que se produce cuando las esporas del hongo Coccidioides immitis penetrar al organismo a través de los pulmones. Es más común en zonas desérticas del sudeste de los Estados Unidos, América Central y América del Sur.

Las personas con sistema inmunitario debilitado son más vulnerables a esta infección:

  • VIH
  • Cáncer
  • Embarazo
  • Terapia antifactor de necrosis tumoral
  • Quimioterapia
  • Afecciones cardiopulmonares
  • Transplantados
  • Glucocorticoides

Síntomas

En general las personas con coccidioidomicosis aguda no presentan síntomas. Otros pueden tener síntomas de neumonía, resfrío, o gripe. En los casos en que aparecen síntomas, estos comienzan entre los 5 y los 21 días tras la exposición al hongo y pueden incluir:

  • Dolor torácico
  • Fiebre y sudoración fría
  • Dolor y rigidez articular
  • Tumoraciones rojizas y dolorosas en la parte inferior de las piernas
  • Dolores musculares
  • Hinchazón de piernas, tobillos y pies
  • Tos que puede ser con flema y sangre
  • Dolor de cabeza
  • Inapetencia
  • Rigidez en el cuello

En raras oportunidades la infección se propaga desde los pulmones a través del torrente sanguíneo y compromete los huesos, las articulaciones, la piel, los ganglios linfáticos, el sistema nervioso central u otros órganos.

Las personas con esta forma más generalizada de infección pueden resultar gravemente enfermes y los síntomas incluir:

  • Inflamación o drenado de los ganglios linfáticos
  • Síntomas pulmonares graves
  • Sensibilidad a la luz
  • Cambios en el estado mental
  • Inflamación articular
  • Rigidez en el cuello
  • Pérdida de peso
  • Lesiones cutáneas en la cara

Tratamiento

Generalmente la enfermedad desaparece sin tratamiento. Puede indicarse reposo en cama y tratamiento para los síntomas.

En los casos de sistema inmunitario debilitado, puede ser preciso tratamiento antimicótico con anfotericina B, fluconazol o itraconazol.

En algunos casos es necesaria la intervención quirúrgica para extirpar la parte del pulmón que resultó infectada, esto principalmente cuando se trata de enfermedad grave o crónica.

Pronóstico

El pronóstico depende en gran medida del estado general de salud del paciente y de la forma de la enfermedad.

El pronóstico de la enfermedad aguda es bueno y de las formas crónicas o graves también.

Los casos en que la enfermedad se ha diseminado tienen una alta tasa de mortalidad.

Posibles complicaciones

  • Acumulación de pus en los pulmones
  • Cicatrización del pulmón
  • Abscesos pulmonares

Estas complicaciones son más comunes en las personas con sistemas inmunitarios debilitados.

Después de 20 años o más de la primera infección, puede desarrollarse una forma crónica de la infección. Los abscesos pulmonares pueden formarse y romperse, secretando pus en el espacio pleural (entre los pulmones y las costillas).