Tips para engañar al hambre

Mascar chicle, desayunar bien, comer toronja antes de las comidas, incorporar grasas saludables a la dieta…

Colaciones saludables
Colaciones saludables

Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), aproximadamente, el 36% de los adultos estadounidenses padecen obesidad o sobrepeso, dos factores de riesgo para enfermedades como la diabetes, la hipertensión, el cáncer, entre otras.

Por ello, para evitar los ataques de ansiedad en los que se asalta el refrigerador y se arrasa con todo lo que hay dentro, algunos tips para engañar al estómago:

1

Masticar chicle

El chicle es muy efectivo para calmar la ansiedad y según investigadores de la Universidad de Rhode Island, las personas que mascan chicle en la mañana, ingieren 67 calorías menos en el almuerzo.

2

Desayunar bien

El desayuno es la comida más importante del día y no es sólo un dicho popular. Además de ser fundamental para aportar la energía necesaria para afrontar las demandas físicas e intelectuales del día, ayuda a que el estómago esté saciado por unas cuantas horas, con lo cual se llega con menos apetito a la siguiente comida. Y de acuerdo con un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Minnesota, desayunar reduce el riesgo de obesidad y diabetes. Un buen desayuno debería incluir yogurt, leche, cereales, frutas, granos enteros y alimentos ricos en proteínas que producen saciedad durante varias horas.

3

Grasas saludables

Incorporar grasas saludables a la dieta como aceite de oliva o canola, frutos secos, aguacate o semillas ayuda a que el estómago esté satisfecho y además a que el cerebro reciba señal de plenitud, con lo cual el hambre entre comidas no será un problema.

4

Beber abundante agua

Beber agua antes de las comidas ayuda a perder peso, puesto que produce saciedad.

5

Realizar actividad física

Hacer ejercicio además de ayudar a controlar el peso, estimula la producción de endorfinas, unas sustancias que brindan bienestar evitando que se busque el placer en la comida. Durante la práctica de actividad física no se activa la hormona del apetito y el organismo se siente saciado hasta por dos horas después.

6

Dormir más

Un estudio de la Universidad de Uppsala, en Suecia, encontró que hay una región del cerebro asociada con el apetito, que muestra mayor actividad en respuesta a las imágenes de la comida, luego de una noche con falta de sueño.

7

Tener al alcance de la mano siempre colaciones saludables

Tener en el refrigerador colaciones saludables y bajas en grasas y calorías como frutas, vegetales, cereales, yogures descremados, etc., ayuda a que en esos momentos de apetito voraz no se arrase con alimentos de alto contenido calórico.

8

Comer toronja antes de cada comida

Comer ½ toronja antes de cada comida, ayuda a comer menos, quemar más grasas y saciar más el estómago.