La pimienta de cayena ayudaría a quemar calorías

Según un nuevo estudio realizado por Richard Mattes, profesor distinguido de los alimentos y la nutrición en la Universidad de Purdue en West Lafayette, Indiana, publicado en Physiology & Behavior, la pimienta roja de cayena o chile en polvo (un tipo de pimienta roja) podría ayudar a quemar calorías y reducir el apetito, sobre todo, en aquellas personas que no acostumbran a comer picantes.

El estudio halló que media cucharadita de pimienta de cayena mezclada con otros alimentos o ingerida en una capsula, ayudó a que adultos jóvenes con un peso normal quemaran alrededor de 10 calorías más durante un lapso de 4 horas, que aquellos que comieron la misma cantidad de alimentos pero no consumieron la pimienta.

La respuesta del apetito fue distinta entre aquellos que comían con frecuencia pimienta roja y los que no, por lo cual según Mattes, esto sugiere que cuando el estímulo no es familiar el efecto es mayor. Apoyándose en el estudio explica que a lo que la persona se acostumbra al picante, el efecto comienza a esfumarse.

Mattes cree que la explicación es que la pimienta estimula el nervio trigémino, uno de los principales de la cabeza y el cuello.

La prueba

Para realizar este estudio, se reclutó a 25 estudiantes universitarios (hombres y mujeres) con un promedio de edad de 23 años y un índice de masa corporal (IMC) de 22.

13 de los participantes reclutados manifestó comer comida picante, mientras los otros 12 dijo no hacerlo.

Se les pidió realizar un total de 6 visitas al laboratorio una vez a la semana para realizar exámenes, se recomendó evitar el alcohol, la cafeína y los ejercicios extenuantes, antes de los mismos.

Se realizaron pruebas de laboratorio a los participantes con 12 horas de ayunas, para ver el gasto energético en reposo, medir la temperatura, etc.

Posteriormente, se les asignó al azar a comer con o sin pimienta roja (3 visitas eran con pimienta y 3 sin ella). La pimienta era ingerida en cápsulas de gelatina o mezclada con otros alimentos.

Los investigadores midieron en gasto energético antes y después de las comidas, lo que posibilitó realizar un seguimiento del gasto calórico con o sin pimienta.

El apetito fue medido a través de un cuestionario antes de las comidas de prueba y cada 30 minutos luego de comer.

Al cabo de unas 4 horas de visita luego de comer la pimienta, se les dio a los participantes la cantidad que quisieran de macarrones y queso.

Promedialmente los que no acostumbraban a comer picantes, ingirieron alrededor de 66 calorías menos del plato de macarrones con queso los días que comieron pimienta en comparación con los días que no lo hicieron. Mientras que los que comían picante con frecuencia consumieron la misma cantidad de calorías en la comida de macarrones con queso luego de cada visita. El efecto (menor consumo calórico) fue mayor en aquellos que no eran usuarios regulares de pimienta.

Mattes señala que incorporar pimienta roja a la dieta, modera el consumo y si bien es un efecto sutil, es un hábito fácil de incorporar y combinado con otros factores, suma al ahorro calórico y en consecuencia al aumento de peso.