Uretritis no Gonocócica: una ETS no muy conocida

La uretritis no gonocócica es una enfermedad de transmisión sexual más frecuente en hombres de entre 15 y 30 años con múltiples parejas sexuales.

Dolor en el abdomen a casa de uretritis no gonocócica

La uretritis no Gonocócica (“NGU” siglas en inglés) también llamada uretritis no específica, es una infección bacteriana de la uretra causada, generalmente, por la bacteria Chlamydia trachomatis, responsable de la clamidia y con menor frecuencia por la Mycoplasma genitalium.

Casi todos los gérmenes que causan esta infección se transmiten a través de las relaciones sexuales, cuando entran en contacto las membranas mucosas con la zona infectada. Por lo cual se la considera una enfermedad de transmisión sexual. Sin embargo, existen otras formas de contagio no sexual como una infección en el tracto urinario o de la prostatitis bacteriana.

Por causas anatómicas, es más común en hombres que en mujeres. Y los varones de entre 15 y 30 años con múltiples parejas sexuales están más propensos a ser infectados.

Síntomas

Los síntomas suelen manifestarse entre la primera y la quinta semana posterior a la infección. Pero existen casos en los que cursa de forma asintomática.
Hombres

  • Salida de flujo por el pene.
  • Dolor o ardor al orinar.
  • Irritación.
  • Picazón.
  • Sensibilidad.

Mujeres

Los patógenos causantes de la uretritis no Gonocócica en los hombres, pueden ser los responsables de infecciones como la cervicitis mucopurulenta o la vaginitis en las mujeres.

Tratamiento

La uretritis no gonocócica se trata con antibióticos. Los más utilizados son la doxiciclina, tetraciclina y la azitromicina.

Durante la infección activa no se recomienda mantener relaciones sexuales hasta pasados los siete días de iniciado el tratamiento para no contagiar a los compañeros sexuales. En caso de tener pareja, ésta también deberá recibir tratamiento.

Complicaciones

Si la uretritis no gonocócica no es tratada tempranamente o correctamente, pueden surgir graves complicaciones como la enfermedad inflamatoria pélvica que puede provocar un embarazo ectópico o infertilidad cuando se vuelve crónica. Las mujeres pueden sufrir también dolor pélvico crónico o un aborto espontáneo.

En los hombres las complicaciones pueden abarcar síndrome de Reiter, lesiones cutáneas o conjuntivitis.