Lo que hay que saber de los analgésicos
Algunos analgésicos tomados en exceso pueden traer efectos secundarios serios
Algunos analgésicos tomados en exceso pueden traer efectos secundarios serios
Es muy frecuente consumir analgésicos de venta libre para distintos dolores como ser de cabeza, musculares, para bajar la fiebre, etc. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el 70% de los norteamericanos los consumen de manera regular. Sin embargo, el uso sin abusivo y sin ningún tipo de control puede traer consecuencias negativas. Para saber, hoy en Sanar te damos una lista de las cosas que se deben saber sobre los analgésicos.
No se aconseja el uso de aspirinas en menores de 16 años
El uso de aspirinas en niños de menos de 16 años, podría estar asociado al Síndorme de Reye. Por ello, en niños se aconseja el uso de acetaminofén (7 mg por ½ kilo, aproximadamente, de peso en niños de más de 2 años) o ibuprofeno (los niños de entre 6 meses y 12 años pueden tomar 5 mg por cada ½ kilo de peso).
Hay distintos tipos de analgésicos
Hay principalmente dos tipos de analgésicos:
- Acetaminofén: Tylenol por ejemplo
- NSAID: Antiinflamatorios no esteroides como ser ibuprofeno, naproxeno sódico, aspirinas, etc
No todos los analgésicos pueden usarse en el embarazo
Durante el embarazo hay algunos fármacos que están contraindicados. Para aliviar algún dolor o malestar durante el mismo, pueden usarse dosis pequeñas de acetaminofén y evitarse los NSAID (antiinflamatorios no esteroides). Éstos últimos aumentan el riesgo de aborto espontáneo y malformaciones.
Los antiinflamatorios no esteroideos (NSAID) irritan el estómago
Este tipo de analgésicos afectan el estómago, favoreciendo la acidez estomacal. Por ello, consumirlos durante mucho tiempo y en altas dosis, pueden producir úlceras o reflujo.
La combinación de analgésicos y alcohol
Según el Dr, Michael E. Mullins de la Universidad Washington.:
Consumir alcohol junto con analgésicos puede ser peligroso: al mezclarlo con NSAID habría un mayor riesgo de irritación y sangrado en el tracto digestivo, mientras que combinarlo con acetaminofén produciría daños hepáticos graves
El acetaminofén daña el hígado
Según la Administración de Alimentos y Drogas (FDA), tomar dosis muy elevadas de este analgésico o hacerlo durante mucho tiempo, puede producir daño al hígado.
Los analgésicos NSAID en dosis elevadas dañan los riñones
Tomar este tipo de analgésicos en dosis altas o por períodos prolongados puede producir daño en los riñones. Por ello, si se padece alguna enfermedad renal, es mejor consultar previamente al médico.
Analgésicos NSAID y problemas cardiovasculares
Las dosis elevadas de NSAID o consumirlas por más de 15 días, aumenta el riesgo de hipertensión, ataque cerebral e infarto.