Uso responsable de los antibióticos

Tomarlos tal y como los prescribe el médico y evitar la automedicación ya que puede generar resistencia a los mismos

Medicamentos

El uso irresponsable e inadecuado de los antibióticos puede generar consecuencias graves para la salud, ya que se genera resistencia a los mismos. La automedicación es algo frecuente en algunos casos y debe evitarse para prevenir males mayores.

Resistencia a los antibióticos

Los virus y bacterias son los principales tipos de gérmenes que causan la gran mayoría de enfermedades. Los antibióticos matan las bacterias pero no los virus. Por ello, no son indicados para el tratamiento de gripes y resfríos, ya que estos cuadros son causados por éstos últimos.

En ocasiones los gérmenes se hacen muy fuertes y resisten los efectos de los medicamentos y ello es lo que se conoce como resistencia a los antibióticos. Ésta puede producirse por el uso excesivo de antibióticos sin indicación médica. Cuánto más se usan, más resistentes se vuelven los gérmenes y en consecuencia las enfermedades pueden volverse muy difíciles de combatir.

Los Centros para el Control y Prevención de enfermedades (CDC) han realizado importantes esfuerzos para evitar el uso innecesario de antibióticos en niños y adultos. Sin embargo, el uso inadecuado sigue siendo aún un problema de salud pública.

El consumo de antibióticos cuando no es necesario, puede provocar más daños que beneficios. Por ejemplo generar resistencia a los fármacos y efectos adversos. Según los CDC, esta es la causa más frecuente de ingreso de niños a las emergencias.

Tomar antibióticos con responsabilidad

Es importante que las personas entiendan que cuando el médico no receta antibióticos es porque no son necesarios y exigirlos no tiene sentido. Para las infecciones virales no son necesarios, ya que no las combaten. Tampoco es una buena medida tomar los que le han sido recetados a otros, puesto que pueden no ser efectivos para ti.

El uso responsable de antibióticos implica tomarlos tal como los prescribe el médico, no saltearse tomas, modificar las dosis, suspender el tratamiento aunque los síntomas desaparezcan (no completarlo puede causar recaídas y favorecer el desarrollo de bacterias resistentes), ni guardarlos para futuras enfermedades.

Los latinoamericanos tienen una gran tendencia a la automedicación, la cual en algunos países alcanza entre un 35 y un 40%, y ello incluye los antibióticos. Así lo explicó el Dr. Gabriel Hara, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS):

realizamos una investigación en Paraguay, Honduras, Nicaragua y Perú, entre 2005 y 2008. Y constatamos que entre un 14 y un 60 % de las medicaciones compradas en farmacias, son antibióticos

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la automedicación con antibióticos puede causar una epidemia de bacterias resistentes. El consumo irresponsable debilita la capacidad de los mismos para combatir las infecciones con bacterias.