Científico chino podría ser condenado a pena de muerte
He Jiankui sería acusado por corrupción y soborno en China y podría afrontar la pena capital.
He Jiankui sería acusado por corrupción y soborno en China y podría afrontar la pena capital.
He Jiankui, el científico chino que alcanzó notoriedad tras haber logrado modificar genéticamente a dos gemelas en noviembre pasado, podría estar enfrentando la pena de muerte, así lo dio a entender el científico Robin Lovell-Badge quien organizó la Segunda cumbre Internacional en Edición Genética Humana en la Universidad de Hong Kong.
He podría terminar enfrentando distintos cargos como corrupción, eso es algo que no quieres [ser asociado] en China estos días.
En noviembre de 2018, el científico chino, He Jiankui, ocupó las primeras planas de los principales diarios del mundo al asegurar que había logrado modificar los embriones de dos gemelas para hacerlas inmunes a tres virus, entre ellos el de VIH. Si bien no existen pruebas concretas de su trabajo, el científico estaría enfrentando la pena de muerte, al menos así lo considera Robin Lovell-Badge.
Lovell-Badge hizo estas declaraciones al diario británico The Telegraph.
Existe una investigación oficial liderada por los Ministerios de Ciencia y Salud, (…) mucha gente probablemente va a perder su trabajo, obviamente él no era el único involucrado en esto.
Como se recordará, al mes siguiente de su hazaña científica, He Jiankui fue reportado como desaparecido por diversos medios de comunicación; nadie supo de su paradero hasta la primera semana de este año cuando The Telegraph informó que se encontraba viviendo en un departamento en Shenzen, China, el cual contaba con un fuerte resguardo armado.
No queda claro aún si estos guardias velan por la seguridad de He debido a las muchas amenazas de muerte que ha recibido o si este se halla bajo arresto domiciliario.
Según sus propias declaraciones, Lovell-Badge teme que a los cargos de corrupción que pudiera enfrentar He, se agregue otro como soborno al haber eludido la supervisión de su investigación por parte del gobierno, siendo ambos delitos castigados con pena de muerte en China.