Enfermedades incompatibles con la conducción de automóvil
Epilepsia, esquizofrenia, insomnio, Parkinson…
Epilepsia, esquizofrenia, insomnio, Parkinson…
La renovación del carnet de conducir implica una revisación médica en la cual puede encontrarse algún problema de salud o enfermedad que impida la entrega del mismo. Entre las afecciones que con mayor frecuencia interfieren con la conducción están:
Problemas nerviosos o enfermedades mentales graves o del comportamiento
Por ejemplo esquizofrenia, depresión, trastorno obsesivo compulsivo, trastornos del sueño ( insomnio, la hipersomnia, la narcolepsia o el síndrome de apnea del sueño) pueden interferir con la conducción. La falta de lucidez y claridad mental al volante pueden provocar un accidente.
Enfermedades neurodegenerativas, del cerebro, trastornos neuromusculares
Parkinson, Alzheimer, la esclerosis múltiple, Atrofia muscular espinal, Esclerosis lateral amiotrófica.
Problemas respiratorios
Los problemas respiratorios que constituyen un obstáculo con la conducción de automóviles, son las que producen disneas al más mínimo esfuerzo o actividad física
Enfermedades cardíacas o trastornos cardiovasculares
Un problema cardíaco mientras se conduce como ser un ataque cardíaco o un dolor incapacitante en el pecho puede ser causante de un accidente de tránsito fatal. Por lo cual si al realizarse un chequeo médico apareciera alguna afección cardíaca, aunque el carnet de conducir esté en fecha, lo recomendable por la salud propia y ajena es no conducir. La hipertensión arterial, las arritmias o embolias no controladas pueden consistir un riesgo.
Diabetes y cáncer
Los peligros más grandes de estas enfermedades no están en sí mismos sino en la medicación con que se tratan las mismas. En el caso de los diabéticos, es importante que tengan controlada la glucemia para evitar los episodios de hiperglucemia e hipoglucemia que pueden causar mareos, malestares y pérdidas de la visión que pudieran causar algún accidente al volante. En el caso de los pacientes con cáncer que reciben tratamiento de quimioterapia, deben esperarse 3 meses desde que se finaliza el mismo para recién conducir, debido a que los efectos secundarios comprometen la integridad física.
Epilepsia
Los ataques epilépticos al volante pueden ser muy peligrosos y causantes de accidente. Sin embargo, las personas que sufren este problema y se controlan con las medidas neurológicas y medicación indicada, siempre que cuenten con el aval médico pueden obtener su carnet de conducir.
Problemas de la vista
Las personas con algún problema en la vista que dificulte su visión o afecciones severas como miopía, glaucoma, cataratas, degeneración macular, sólo pueden obtener el carnet de conducir con un aval médico.