Neuralgia

Se trata de un dolor agudo, muy intenso que sigue la ruta de un nervio y es consecuencia de la irritación o daño del mismo.

Las neuralgias más frecuentes son:

• Neuralgia del trigémino
• Herpes zóster

Causas

• Insuficiencia renal crónica
• Infecciones como herpes zóster, sífilis, VIH, enfermedad de Lyme
• Porfiria
• Traumatismo
• Irritación por químicos
• Diabetes
• Algunos fármacos como paclitaxel, cisplatino o vincristina
• Presión sobre los nervios por huesos, tumores cancerígenos, vasos sanguíneos o ligamentos

La neuralgia del trigémino y la neuralgia posherpética son las formas más frecuentes de neuralgia. Una neuralgia asociada, aunque menos común afecta al nervio glosofaríngeo (el que suministra sensibilidad a la garganta).

La neuralgia es más habitual en personas de edad avanzada, aunque puede presentarse a cualquier edad.

Síntomas

• Incremento de la sensibilidad de la piel a lo largo de la ruta del nervio comprometido, de modo tal que todo tipo de contacto produce dolor
• Debilidad o parálisis completa de los músculos inervados por el mismo nervio
• Entumecimiento a lo largo de la ruta del nervio:
• Agudo y punzante
• Empeora cuando se mueve la zona
• En el mismo lugar para cada episodio
• Puede ser intermitente o ser ardiente y constante

Tratamiento

El tratamiento dependerá de la causa, la gravedad del dolor y la localización de la neuralgia.

El estricto control del azúcar en sangre, puede apresurar la recuperación en pacientes con diabetes que desarrollen neuralgias.

Los fármacos para el control del dolor pueden incluir:

• Antidepresivos
• Analgésicos suaves de venta libre
• Parche de lidocaína
• Anticonvulsivos
• Analgésicos narcóticos
• Cremas tópicas con capsaicina

Otros tratamientos pueden incluir:

• Bloqueo de nervios
• Determinados procedimientos como ablación mediante radiofrecuencia, compresión con globo, calor, para disminuir la sensibilidad en el nervio
• Inyecciones con drogas para el alivio del dolor
• Fisioterapia
• Cirugía para el alivio de la presión del nervio

Es probable que estos procedimientos no sean efectivos para el alivio de los síntomas y provoquen pérdidas de sensibilidad o sensaciones anormales.

Cuando fallan los tratamientos de este tipo, los médicos pueden probar con la estimulación de la médula espinal o los nervios y en casos raros, con un procedimiento llamado estimulación de la corteza motora. El mismo consiste en la colocación de un electrodo sobre la parte del nervio, el cerebro o la médula espinal, que se conecta a un generador de pulsos bajo la piel, para cambiar la manera en que los nervios envían las señales y puede disminuir el dolor.

Pronóstico

La mayoría de las neuralgias no son mortales ni signos de enfermedades graves que puedan poner en riesgo la vida. Sin embargo, el dolor puede llegar a ser muy intenso, insoportable.

En general casi todas las neuralgias responden bien al tratamiento. Los episodios de dolor suelen ser intermitentes, aunque pueden ser más frecuentes cuando el paciente envejece.

En algunos casos, la afección puede mejorar espontáneamente o desaparecer aunque no se haya encontrado la causa.

Complicaciones

• Discapacidad como consecuencia del dolor
• Complicaciones de la cirugía
• Efectos secundarios de los medicamentos usados para el control del dolor