Diferencia entre demencia y alzhéimer

Son enfermedades neurodegenerativas que no tienen cura cuya principal diferencia es que el alzhéimer conduce irremediablemente a la muerte mientras que la demencia no necesariamente.

Alzheimer y demencia

En el mundo, 47,5 millones de personas tienen demencia, según datos de la Organización Mundial de la Salud y se prevé que para 2030 la cifra ascienda a 82 millones. El alzhéimer es el tipo más frecuente. Pero existen otros, como la demencia por cuerpos de Lewy, la demencia vascular (ocurre como consecuencia de infartos cerebrales) o la demencia frontotemporal.

La demencia es un término que se utiliza para describir el deterioro de las funciones cognitivas. Este afecta la memoria, la atención, la coordinación psicomotriz, la concentración, la comprensión, la comunicación, el razonamiento, la orientación y la capacidad de decidir.

La demencia y el alzhéimer son enfermedades neurodegenerativas que no tienen cura.

El doctor Azuquahe Pérez, neurólogo del Hospital General de La Palma, España, explica al respecto:

El alzhéimer es una enfermedad que no tiene cura y que tiene como final la muerte del paciente, pero en algunos tipos de demencia senil la situación del paciente puede mejorar, dependiendo de la causa de la enfermedad.

Otra diferencia entre ambas enfermedades, es que el alzhéimer es más frecuente en las mujeres, mientras que la demencia senil, cuando la causa es vascular, suele ser más común en los hombres.

Síntomas

El doctor Pérez señala sobre los síntomas de la demencia:

Los síntomas de la demencia aparecen paulatinamente y con el tiempo suelen empeorar, de forma que el paciente no puede hacer las actividades que realizaba de forma habitual.

Demencia

  • Pérdida de memoria a corto plazo.
  • Pérdida de la capacidad de socializar, lo que conduce en algunos casos al aislamiento.

Alzhéimer

  • Pérdida de la memoria a corto plazo.
  • Pérdida de la capacidad intelectual que afecta la toma de decisiones y resolución de problemas.
  • Síntomas psiquiátricos que se manifiestan en agresividad, alucinaciones o paranoia (suelen manifestarse en etapas avanzadas de la enfermedad).
  • Pérdida de las habilidades motoras.

En cuanto a los síntomas en función del avance de la enfermedad, la doctora y coordinadora del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN), Sagrario Manzano, realiza la siguiente puntualización:

…no es lo mismo una fase leve, tanto de demencia en general, como de alzhéimer en particular, en la que no hay apenas alteración, que una fase más avanzada, en la que se sumen otros problemas. Por tanto, no hay una única enfermedad, sino un sinfín de enfermos, cada uno con sus peculiaridades.

Factores de riesgo

El doctor Pérez, explica sobre los factores de riesgo:

El factor de riesgo más importante en ambos casos y que es inevitable es la edad. Entre los 60 y los 70 años de edad es cuando existe un mayor riesgo. La genética puede jugar un papel importante en algunos casos. Las enfermedades cardiovasculares (enfermedades del corazón, alta presión arterial o accidentes cerebrovasculares) también pueden suponer un riesgo.

Manzano, agrega los siguientes factores de riesgo:

…un bajo nivel educativo premórbido, seguir una dieta escasamente cardio saludable, la ausencia de un estilo de vida sano, como el ejercicio físico regular.

Prevención

La demencia es una de las causas más comunes de incapacidad y dependencia en los adultos mayores del mundo entero. Por ello, retrasar lo más posible este momento de la enfermedad en el que los síntomas ya están muy avanzados, es fundamental.

Manzano señala:

De forma práctica y entendible, la idea es retrasar al máximo el momento demencia de la enfermedad, para que, de esta manera, se pueda evitar la dependencia”, explica la especialista.

Lon Schneider de la Facultad de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California en Los Ángeles (EE.UU.)

La atenuación de los factores de riesgo constituye una estrategia poderosa para reducir la carga global de demencia.

Según los autores de un informe de la Comisión para la Prevención Cuidado de la Demencia publicado en la revista “The Lancet”, del cual Lon Schneider es coautor, existen nueve factores que incrementan el riesgo de demencia: bajo nivel educativo, pérdida de la audición, hipertensión, obesidad, tabaquismo, depresión, falta de actividad física, diabetes, falta de contacto social.

Los autores han expresado sobre ello:

…cerca de un 35% de la demencia, esto es, uno de cada tres casos, es atribuible a estos factores de riesgo.

También indicaron:

…las intervenciones no farmacológicas como las terapias grupales de estimulación cognitiva y el ejercicio son beneficiosas para la cognición.