Consejos para sortear las tentaciones en la dieta

Beber té, hacer ejercicio, comer apio…

Comer apio

La tentación impulsa a lo prohibido, es un deseo incontrolable que empuja a hacer aquello que racionalmente se sabe que no hay que hacer pero no se puede evitar. Este deseo tiene su origen en la mente, no en el estómago. Para evitar caer en las tentaciones lo que hay que hacer es controlar la mente y aprender a diferenciar lo que es el hambre de un antojo.

Claro que no es sencillo, requiere de mucha concentración y fuerza de voluntad, pero vale la pena seguir los siguientes consejos para conseguir el objetivo: Perder peso.

1

Eliminar las tentaciones

Este punto es fundamental, para no tentarse es importante que no haya con qué hacerlo o al menos que el acceso a la tentación no esté cerca. Por ello, hay que eliminar del refrigerador todo tipo de alimentos tentadores como ser dulces, pasteles, helados, etc. El no tener la tentación al alcance de la mano ayuda y mucho.

2

Beber agua

Al sentir el impulso incontrolable por comer algo, beber un vaso de agua y asociarlo con una sensación de bienestar, de salud, de belleza. De esta manera será más sencillo que la mente olvide la tentación.

3

Hacer ejercicio

El ejercicio ayuda a eliminar el estrés y a despejar la mente. Por ello, cuando aparezca la tentación realizar una caminata, salir a correr, a andar en bicicleta, etc., puede contribuir a que el pensamiento recurrente de la comida se vaya. Además al practicar actividad física regularmente, los beneficios sobre el cuerpo comenzarán a apreciarse y ello a su vez será un impulso para seguir adelante.

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Beber té

Una taza de té caliente puede sacar la tentación de comer algo que no se debe a media tarde. Además de saciar el apetito aporta muchos beneficios.

5

Cuando llega la tentación esperar 5 minutos

En el momento en que la tentación llega y antes de dejarte vencer y salir corriendo al refrigerador, proponerse esperar 5 minutos. Colocar la alarma del reloj y mientras tanto concentrarse en otra cosa, tratando de desviar el pensamiento y despejar la mente. Cuando suene la alarma, es posible que la tentación ya haya pasado o al menos se haya disipado un poco.

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Comer apio o zanahoria

Aportan pocas calorías, son muy saludables y fáciles de comer. Por ello siempre se deben tener en el refrigerador y cuando la tentación o el hambre voraz se hagan presentes, recurrir a ellos. Es importante también asociar el comer estas verduras con una actividad placentera, ya que si se relaciona con un castigo no funciona.

7

Colocar fotos que te inspiren en la puerta del refrigerador

Las imágenes impactan muy fuerte en el subconsciente y contribuyen a modificar hábitos y crear nuevos. Por lo cual, realizar una selección de fotografías que ayuden en este propósito es muy útil. Por ejemplo de la ropa que se desea usar y no se puede por los kilos de más, del cuerpo que se desearía tener, etc. Esto puede ayudar para recordar permanentemente por qué no hay que caer en la tentación.

8

Realizar una sesión de belleza

Para sortear la tentación y no dejarse vencer por ella, otro recurso útil es dedicarse a una sesión de cuidado y belleza personal, una especie de spa en casa, día de relajación o en algún centro de estética. Dedicarse al cuidado del cabello, las manos, los pies, el cutis, la depilación, etc. De esta manera se mantiene la mente ocupada y alejada de los deseos prohibidos. Además el dedicarse a la belleza personal, levanta la autoestima, hace que uno se sienta mejor, más lindo y ello impulsa a seguir adelante por los objetivos buscados.