Cetoacidosis diabética
Complicación de diabetes tipo 1
Complicación de diabetes tipo 1
Es una afección que se presenta en pacientes con diabetes cuando su cuerpo no puede usar la glucosa como fuente energía, a causa de la insuficiencia de insulina y en su lugar metaboliza la grasa.
En la medida en que las grasas se descomponen, los ácidos denominados cetonas comienzan a acumularse en sangre y orina. Los niveles elevados de cetonas son tóxicos y es lo que se conoce como cetoacidosis.
La cetoacidosis suele ser el primer signo de diabetes tipo 1. También puede aparecer en pacientes que ya han sido diagnosticados, como consecuencia de una cirugía, una lesión, una enfermedad grave o un olvido de la dosis de insulina.
Las personas con diabetes tipo 2 pueden desarrollar esta afección pero es menos común. En general se desencadena tras una grave enfermedad y es más frecuente en afroamericanos e hispanos, como una complicación de la diabetes tipo 2.
Síntomas
- Respiración acelerada y profunda
- Dificultades respiratorias en reposo
- Enrojecimiento de la cara
- Náuseas y vómitos
- Resequedad en la boca y la piel
- Aliento a frutas
- Dolor de estómago
- Dolor abdominal
- Disminución del estado de conciencia
- Fatiga
- Dolor de cabeza
- Disminución del apetito
- Sentidos embotados que pueden llega al coma
- Sed o micción frecuente que se prolonga por un par de días
- Dolores o rigidez muscular
Exámenes de diagnóstico
- Examen de cetonas
- Gasometría arterial
- Medición de la presión arterial
- Examen de amilasa en sangre
- Examen de glucemia
Tratamiento
El objetivo del tratamiento es corregir los elevados niveles de glucosa en la sangre con insulina y reponer los líquidos perdidos por los vómitos o la micción.
En general es necesaria la hospitalización, donde el procedimiento puede incluir:
- Administración de insulina
- Reposición de líquidos y electrolitos
- Tratamiento de la afección como una infección
Pronóstico
La acidosis puede conducir a una enfermedad grave e incluso a la muerte. En personas jóvenes el tratamiento disminuye la tasa de mortalidad, pero en los ancianos y personas que entran en coma, constituye un gran riesgo.
Complicaciones
- Ataque cardíaco y muerte del tejido intestinal debido a la baja presión arterial
- Acumulación de líquido en el cerebro
- Insuficiencia renal