Precios de alimentos continuarán subiendo en países en desarrollo
(Andina). Los habitantes de países en desarrollo seguirán sufriendo por la espiral de precios por otros diez años, según un informe dado a conocer hoy por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
En su informe sobre agricultura 2011-2020, la OCDE y la FAO, que siguen el desarrollo en 34 países, prevén que los precios reales de los cereales suban en una media de un 20 por ciento en la próxima década con respecto a 2001-2010.
A su vez, los precios de la carne podrían subir un 30 por ciento, según recoge un despacho de la agencia de noticias DPA.
Uno de los problemas es que, mientras que los precios seguirán al alza, el crecimiento de la superficie cultivada será lento, añaden los expertos.
La producción agrícola aumentará un 1,7 por ciento anualizado en la próxima década, por debajo de la tasa del 2,6 por ciento de los pasados 10 años.
"Aunque unos precios más altos son normalmente una buena noticia para los granjeros, el impacto puede ser devastador en los países pobres y en desarrollo, donde los habitantes gastan una alta proporción de sus ingresos en comida", según el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría.
El último año las principales causas del alza fueron un clima crecientemente errático y la especulación en los mercados.
Una grave sequía en Rusia, Ucrania y Kazajstán provocó una espiral de precios, sobre todo del pan y de los alimentos para los animales, en tanto que la caída de las reservas hicieron subir los precios del azúcar a su mayor nivel en 30 años en febrero.
El problema ha aumentado los temores de que se repitan las revueltas por los altos precios que sacudieron numerosos países en desarrollo en 2008. Una de cada siete personas en todo el mundo -925 millones- pasa hambre, de acuerdo con la organización humanitaria Oxfam.
Los precios de los alimentos fueron asimismo una de las causas de las revoluciones en el mundo árabe este año.
El informe OCDE-FAO añade que las buenas cosechas en 2011 harán bajar los precios a corto plazo, pero alerta de que el alivio será breve.
El director general de la FAO, Jacques Diouf, indicó que la clave para contener la volatilidad es mejorar el desarrollo agrícola para aumentar la superficie cultivada, sobre todo entre los pequeños productores en los países en desarrollo.
Ambas organizaciones llaman al Grupo de los 20, que reúne a países industrializados y emergentes, a tomar medidas para mejorar la producción, eliminar políticas comerciales que distorsionen el comercio y mejorar la transparencia en el intercambio de productos agrícolas.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, cuyo país organiza una cumbre del G20 en noviembre en Cannes, comparó la especulación con las materias primas a la de los mercados financieros que llevó a la crisis mundial de 2008. Por ello llamó a los líderes mundiales a tomar medidas en contra de esta especulación con los alimentos.